Sociedad de Biología de Córdoba
Conferencia
"Dr. Jorge W. Abalos"
- 2022 -
Dr. José W. Priotto
MANEJOS AGRÍCOLAS AMIGABLES CON LA BIODIVERSIDAD, UNA OPORTUNIDAD DE CONSERVAR EN PAISAJES AGRÍCOLAS HOMOGÉNEOS: PEQUEÑOS MAMÍFEROS Y AVES COMO EJEMPLO
Instituto de Ciencias de la Tierra Biodiversidad y Ambiente (ICBIA, CONICET- FCEFQyN-UNRC)
MANEJOS AGRÍCOLAS AMIGABLES CON LA BIODIVERSIDAD, UNA OPORTUNIDAD DE CONSERVAR EN PAISAJES AGRÍCOLAS HOMOGÉNEOS: PEQUEÑOS MAMÍFEROS Y AVES COMO EJEMPLO
Priotto J W
Instituto de Ciencias de la Tierra Biodiversidad y Ambiente (ICBIA, CONICET-UNRC), Departamento de Ciencias Naturales, Facultad de Ciencias Exactas, Universidad Nacional de Río Cuarto.
E-mail: jpriotto@exa.unrc.edu.ar
El mayor uso de la tierra para explotaciones agropecuarias es una de las principales causas de fragmentación y de desaparición de los ecosistemas naturales en todo el mundo. El concepto de mayor uso abarca tanto la expansión a nuevas áreas como la intensificación de las ya explotadas, entendiendo por lo segundo el aumento de la producción recurriendo a fertilizantes, plaguicidas, riego y mecanización. En Argentina estos procesos se aceleraron a partir del ingreso en el año 1996 del paquete tecnológico compuesto por la soja RoundUP Ready, la siembra directa y el herbicida glifosato; aumentando su producción entre 1985 y 2011 en un 400%. Así, Córdoba pasó de tener en 1992/1993 el 19,30% de su territorio bajo cultivo al 51,58% en la campaña 2017/2018. Tal incremento significó una reducción de la biodiversidad y la consecuente alteración de la estructura y del funcionamiento de los ecosistemas. Dicha reducción no solo redundó en menor número de especies sino, también, en pérdida de interacciones, en cadenas tróficas más simples y en ecosistemas con menos resiliencia. El desafío actual es lograr la mejor combinación de uso de la tierra para producción con conservación de la biodiversidad, una combinación que permita mantener la rentabilidad actual sin comprometer la futura y que evite efectos ambientales adversos a largo plazo. Esto lleva a plantear interrogantes sobre qué características de los paisajes agrícolas favorece la biodiversidad y cómo esto se relaciona con diferentes manejos y prácticas agrícolas. Las respuestas de las especies a los disturbios producidos por la agricultura dependen de su biología y su comportamiento. Hay especies más propensas que otras a verse afectadas por la modificación del ambiente. Las primeras tienen mayor especialización de hábitat, es decir, son más dependientes de las características particulares del tipo de ambiente en que viven, por lo que sufren más los disturbios en cuanto a disponibilidad de alimento, refugio y sitios para reproducción. Contrariamente, las especies generalistas son capaces de adaptarse a diversos tipos de hábitats, por lo que se ven menos afectadas en ambientes alterados, e incluso podrían salir favorecidas. Los pequeños mamíferos y las aves son vertebrados nativos claves que contribuyen en forma importante a una mayor biomasa animal en ambientes de pastizales, así como al equilibrio de los agroecosistemas y al mantenimiento de cadenas alimenticias bien estructuradas. De esta manera, estudiamos el efecto a escala local y de paisaje que tienen diferentes manejos agrícolas sobre los individuos, poblaciones y comunidades de estos grupos de vertebrados y sus contribuciones a mantener funciones ecológicas como la dispersión de semilla y control de invertebrados plagas de agroecosistemas.